Para formar un Equipo Directivo, es necesario centrarse en esa primera palabra de “equipo”. Encontrar a personas o a esa persona con la que se posea una unión, se congenie tanto profesionalmente como a nivel personal es algo ideal, ya que van a ser horas de trabajo y esfuerzo.

Por ello, contar con personas con un compromiso que contagien, que proyecten un sentido de trabajo y responsabilidad compartida, que sepan y tengan ilusión en conseguir objetivos comunes, que animen a realizar el trabajo de forma colaborativa y sepan negociar los desajustes ante diferentes intereses, es de gran importancia.

Compartimos intereses, metodologías y formas de ver la educación muy similares. Ambas entendemos la educación como " un proceso de nutrición de aprendizaje, donde podamos innovar en el centro para poder incluir a toda la comunidad educativa, partiendo de un talante democrático y cercano; asumiendo a su vez la responsabilidad que posee el cargo de Equipo Directivo en un centro".