Los alumnos y alumnas de 5º de Educación Primaria disfrutaron de una agradable jornada de esquí en la estación invernal de San Isidro el día 5 de marzo de 2012. La actividad se enmarca dentro de la oferta de la Fundación Provincial de Deportes perteneciente a la Diputación Provincial de Palencia.
¡Parece que se lo pasaron en grande!
AÚN NO TE EMOS PODIDO OLVIDAR Y TE SEGIREMOS QUERIENDO
La seguridad contra incendios en garajes comunitarios es una cuestión que requiere especial atención. Estos espacios concentran una gran cantidad de vehículos, combustibles, aceites y materiales inflamables, lo que incrementa el riesgo de incendio. En caso de emergencia, la rapidez en la respuesta puede marcar la diferencia entre un incidente controlado y una tragedia. Por ello, las Bocas de Incendio Equipadas (BIEs) se convierten en un elemento esencial de cualquier sistema de protección.
Una Boca de Incendio Equipada (BIE) es un equipo fijo conectado a una red de agua presurizada que permite la extinción manual inmediata de incendios. Su diseño está pensado para que cualquier persona pueda utilizarla de manera rápida y segura en los primeros instantes de un fuego.
Cada unidad cuenta con los siguientes componentes:
Manguera enrollada (semirrígida o flexible).
Válvula de apertura y cierre.
Boquilla regulable con chorro de agua o niebla.
Manómetro para el control de presión.
Armario metálico homologado.
Señalización fotoluminiscente visible incluso en ambientes con humo.
La función principal de una BIE es contener el fuego antes de que se propague, reduciendo los daños estructurales y materiales y facilitando la labor de los equipos de bomberos.
Existen dos tipos principales de sistemas: BIE 25 mm y BIE 45 mm. Ambos cumplen la misma función, aunque su uso y características varían según el tipo de instalación.
La BIE 25 mm cuenta con una manguera semirrígida de 25 milímetros de diámetro, ideal para garajes comunitarios, edificios residenciales y zonas donde se requiera un equipo fácil de manejar sin necesidad de formación especializada. Su caudal es suficiente para extinguir incendios incipientes y su diseño compacto permite instalarla en espacios reducidos.
Por otro lado, la BIE 45 mm está pensada para naves industriales o instalaciones de gran tamaño. Requiere manipulación por personal entrenado y ofrece un caudal mayor, lo que la hace más potente, pero también más pesada y menos manejable para usuarios no profesionales.
Por ello, muchos se preguntan si es obligatorio instalar BIEs en un garaje comunitario, y la respuesta depende de la superficie y el nivel de riesgo del recinto, aunque en la mayoría de los casos se opta por BIE 25 mm por su eficacia y sencillez de uso.
Muchas personas se preguntan si es obligatorio instalar BIEs en un garaje comunitario. La obligatoriedad de instalación de una BIE está regulada por el CTE-DB SI (Seguridad en caso de incendio) y el RIPCI (RD 513/2017).
Según la normativa vigente, es obligatorio instalar Bocas de Incendio Equipadas en los siguientes casos:
Garajes con más de 500 m² de superficie construida.
Aparcamientos con gran capacidad de vehículos, incluso si la superficie es menor, cuando así lo determine la autoridad competente.
Garajes situados en edificios mixtos donde existan usos complementarios (oficinas, locales comerciales, etc.).
Espacios clasificados como riesgo especial alto según el CTE.
En resumen, si el garaje supera los 500 metros cuadrados, la instalación de BIEs no es opcional, sino una exigencia legal que debe cumplirse para obtener la licencia de actividad o de ocupación.
Para garantizar una protección eficaz, la instalación debe cubrir la totalidad de la superficie del garaje. La distancia máxima entre dos BIEs no debe superar los 25 metros lineales, de forma que el alcance de la manguera más el chorro de agua cubra todas las zonas de riesgo.
Las BIEs deben instalarse:
En puntos visibles y de fácil acceso.
Cerca de salidas o rutas de evacuación.
A una altura entre 80 y 120 cm desde el suelo.
Con espacio libre alrededor para su uso inmediato.
Además, toda BIE debe contar con señalización fotoluminiscente conforme a la norma UNE 23033-1, que permita su rápida localización incluso en condiciones de baja visibilidad.
La presión del agua es uno de los aspectos más importantes para asegurar la eficacia del sistema.
En las BIE 25 mm, la presión mínima exigida es de 3,5 bares.
En las BIE 45 mm, la presión mínima asciende a 4 bares.
Esta presión garantiza un caudal continuo y estable que permita controlar el incendio inicial de manera efectiva, evitando su propagación a otros vehículos o estructuras del garaje.
El RIPCI (RD 513/2017) establece los requisitos técnicos, las pruebas hidráulicas obligatorias, y los intervalos de mantenimiento que deben seguirse para asegurar el correcto funcionamiento de cada equipo.
Las revisiones obligatorias son las siguientes:
Cada 3 meses: inspección visual, verificación de presión y señalización.
Cada año: limpieza del equipo, comprobación de boquillas, manómetros y prueba funcional.
Cada 5 años: prueba hidráulica completa según el RIPCI.
Un mantenimiento adecuado no solo garantiza el cumplimiento legal, sino también la eficacia del sistema en caso de incendio, evitando fallos por obstrucción, pérdida de presión o deterioro de materiales.
Más allá de su obligatoriedad, la instalación de BIEs en garajes es una medida preventiva fundamental. Estas son algunas de sus ventajas más destacadas:
Permiten una respuesta inmediata ante un fuego incipiente.
Proporcionan un suministro constante de agua, siempre que exista presión en la red.
Minimizan los daños estructurales y materiales.
Facilitan la evacuación al controlar la propagación del humo.
Complementan la labor de los bomberos, reduciendo el riesgo general.
En un garaje cerrado, donde la temperatura de un vehículo en llamas puede superar los 1.000 °C, disponer de una Boca de Incendio Equipada es una medida que puede salvar vidas y proteger la inversión de los propietarios.
La instalación de BIEs en garajes comunitarios es más que una exigencia normativa: es una decisión estratégica para la seguridad y la tranquilidad de todos los ocupantes. Cumplir con el CTE-DB SI y el RD 513/2017 garantiza que el edificio dispone de una protección activa frente al fuego, preparada para actuar en el momento más crítico.